¿Seguiría siendo yo si mi ocio fuera distinto? ¿Si no me gustase lo que me gusta, sería yo? ¿De verdad influye tanto en una persona? No hay mayor reflejo de nuestra personalidad que nuestras acciones, entonces, si aquello que hacemos no lo hiciésemos, ¿seríamos cómo somos? ¿Tendría la misma personalidad, pero con gustos distintos, o esta también cambiaría? ¿Qué sería lo que permanece?
Si volviese atrás al pasado y cambiase mi forma de invertir mi tiempo ¿habría acabado haciendo lo que hago ahora porque es lo que de verdad me gusta? En todo caso, ¿Significaría eso que nacemos con unos gustos concretos y solo tenemos que encontrarlos?, es decir, ¿Es innato los lugares/actividades donde encontramos nuestro bienestar?
Carolina Equisoain Apesteguía
