La belleza es (en una de sus
facetas) la inocencia. La falta de malicia y el amor que derrochan los pequeños
es algo que nos emociona muchas veces y produce en nosotros una extraña
sensación un tanto placentera que entra de forma integral en el concepto de
belleza que todos tenemos.
La belleza no tiene por qué ser
siempre concebida como algo meramente físico. Es algo que va más allá; y que en
el caso de la inocencia, no logramos del todo comprender.
Pablo Sáez Gómez
Colegio Irabia-Izaga