En cada aplicación mostramos una persona distinta al resto de aplicaciones y a la persona que somos realmente.
Es como si a partir de una foto verdadera, hubiese infinitas copias en miniatura, componiendo así a la original.
La idea de la foto es mostrar como los infinitos calcos en miniatura (las diferentes réplicas que albergamos) nos son tan importantes que, peldaño a peldaño, esas copias forman figuradamente a la original. A la realidad.
Lorena Albillos Muñoz
Colegio Sagrado Corazón